Spirit espera en silencio...

El robot Spirit no se comunicó con la Tierra el pasado 30 de marzo, en su sesión semanal, probablemente debido a su bajo nivel de energía y entrando así en un estado de hibernación, según el JPL.

Spirit, el vehículo de exploración de Marte de la NASA, saltó una sesión de comunicación planificada para el 30 de marzo y, como se había previsto a partir de las recientes proyecciones de suminstro de energía del rover, probablemente ha entrado en un modo de hibernación de bajo consumo de energía.

De este modo, el reloj de Spirit seguirá funcionando, pero las comunicaiones con la Tierra y otras actividades están suspendidas con el fin de usar toda la energía disponible para recuperar la calefacción y recargar su batería. Sin embargo, cada vez que la batería alcance una carga suficiente, intentará comunicarse con la Tierra.

"Probablemente no sabremos nada de Spirit durante semanas o incluso meses, pero intentaremos escucharlo cada vez que podamos. Esperamos que Spirit reanude las comunicaciones cuando las baterías estén suficientemente cargadas", dijo John Callas del Laboratorio de Propulsión a Chorro (Jet Propulsion Laboratory, JPL), Pasadena, California, quien es gerente de proyecto de Spirit y Opportunity.

El suministro de energía de Spirit es bajo debido a que Marte se acerca al solsticio de invierno (a mediados de mayo), y el Sol se halla muy bajo en el horizonte. Además, los paneles solares del rover están llenos de polvo, disminuyendo así su eficacia. Spirit había sobrevivido los tres inviernos anteriores porque estaba inclinado hacia el norte para tener sus paneles solares en un ángulo favorable hacia el Sol. Pero esa preparación no ha sido posible este invierno debido a problemas de movilidad, como todos recordarán...

Spirit ha estado comunicándose una vez cada siete días en las últimas semanas. Pero durante el tiempo designado para que el rover se comunicara con el orbitador Mars Odyssey el 30 de marzo, Odyssey no supo nada del vehículo explorador.

En las próximas semanas, la electrónica de Spirit estará mucho más fría que cualquier temperatura que haya experimentado alguna vez en Marte. Las proyecciones térmicas indican que la temperatura probablemente no caerá más bajo de lo que el sistema fue diseñado para resistir, pero la edad del vehículo se suma a la incertidumbre de supervivencia; sus sistemas han envejecido y han soportado muchos más ciclos de temperatura de lo que se creía posible.

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