La NASA analiza el impacto de cohete en la Luna

La agencia espacial estadounidense elogió el trabajo del equipo. Dentro de las próximas semanas se entregará información sobre los resultados obtenidos.


"Este es un gran día para la ciencia y la exploración". Con estas palabras Doug Cooke, el administrador asociado de la Misión de la Dirección de Sistemas de Exploración de la NASA, resume la primera parte de esta misión que mantuvo en vigilia a los miembros de la agencia espacial estadounidense y a varios cientos de personas que esperaron el impacto del cohete Centauro, primero, y luego de la sonda LCROSS.

El primero de estos impactos ocurrió a las 7.31 minutos de esa mañana, cuando el cohete cayó sobre la superficie lunar levantando una columna de polvo sobre la cima del cráter Cabeus, ubicado al sur del satélite natural de la Tierra.

Luego, cuatro minutos después, LCROSS impactó, aunque primero recogió datos y fotografías de los restos que dejó la primera parte de la misión (ver noticia y video del impacto).

Según se detalló en una conferencia de prensa post-impacto, los datos serán analizados por el equipo científico LCROSS, algo que se espera demore varias semanas, hasta que se pueda tener un análisis definitivo de la presencia o ausencia de agua en la Luna.

Además, las imágenes y los videos obtenidos por la comunidad de astrónomos aficionados y el público en general también se utilizarán para mejorar el conocimiento acerca de la luna.

Los científicos informaron que todos los instrumentos a bordo de LCROSS funcionaron normalmente previo al impacto. "Exito de la misión. Hemos recibido confirmación termal de que el impacto ha ocurrido", dijo el control de la misión en el Centro Ames de Investigaciones de la NASA una vez finalizado todo.

El evento fue transmitido por el canal de televisión de la NASA y visto por científicos de todo el mundo, quienes debían disponer de un telescopio de 10 pulgadas como mínimo para ver la nube de partículas que se esparciría cuando se produjera el impacto.

La sonda satelital emprendió su misión hace tres meses y tenía como fin tratar de encontrar pruebas de la existencia de agua, en forma de hielo, en la parte más oscura de la Luna, donde las temperaturas se acercan a los 240 grados centígrados bajo cero, según las estimaciones de los expertos.

0 comentarios:

Publicar un comentario